¿Qué es eso de la sostenibilidad de lo que tanto se oye hablar?
El término “sostenibilidad” está siendo muy usado últimamente. Se está convirtiendo en un término muy machacado, muy manido, y corre el peligro de perder su verdadero sentido.
Cuando hablamos de sostenibilidad desde el punto de vista empresarial nos estamos refiriendo a un balance entre la actividad de la empresa y su efecto en el entorno. Es necesario que la empresa perviva en un entorno próspero, en una relación de prosperidad mutua: de nada sirve que a una empresa le vaya muy bien si su entorno se está empobreciendo. No se trata de buenismo ni filantropía, sino de compaginar el beneficio empresarial con la prosperidad de tu entorno, que ambos vayan de la mano.
¿Cómo ha evolucionado el concepto de sostenibilidad?
Hablando de fechas en general, hasta el año 2000, las empresas estaban preocupadas sólo de maximizar el beneficio para sus accionistas, ese era su objetivo principal y casi único.
Entre 2000 y 2010, ya se empezó a hablar de maximizar el beneficio para los accionistas, revertiendo una parte a la sociedad en la que opera.
Después del año 2010, ya se habla de maximizar la creación de Valor Compartido, es decir, cómo puedo hacer que mi empresa y mi entorno prosperen al mismo tiempo.
Sostenibilidad es algo más que medio ambiente
Cuando hablamos de Sostenibilidad no sólo nos estamos refiriendo a medio ambiente.
La sostenibilidad tiene 3 vertientes: la medioambiental, la social y la económica.
ASINCA es la entidad más representativa del sector industrial de Canarias y es consciente del papel que desempeña en las islas, por eso lleva a cabo acciones dirigidas al desarrollo social, al bienestar de quienes trabajan con ella, a reducir el impacto que ocasiona en el medioambiente y maximizar el impacto que genera en la economía de Canarias.
¿Cuál es papel de Elaborado en Canarias en la sostenibilidad?
Las empresas que elaboran sus productos en Canarias influyen de forma importante en todas las áreas de la sostenibilidad. Pertenecen al sector que posiblemente más influencia tenga, no tanto en cuanto a valor total, pero sí relativo, son conscientes de esa influencia y, por ello, tratan de maximizar o minimizar, según corresponda, sus consecuencias en Canarias:
La sostenibilidad no debe formar parte de una estrategia de maquillaje
Es posible que algunas empresas utilicen el discurso de la sostenibilidad como una acción de maquillaje, pero Asinca está convencida de que comunicar lo que una empresa hace debe ser la última parte de un proceso. Primero hay que hacer las cosas, llevar a cabo acciones de responsabilidad, de sostenibilidad, y después, nunca antes, hacerlo saber, comunicarlo. La comunicación debe ser ajustada a la dimensión o al alcance de las prácticas de responsabilidad social que se llevan a cabo porque que es contraproducente intentar “agrandar” pequeñas acciones de buenas prácticas a través de la comunicación. El público se da cuenta, lo percibe enseguida y puede llegar a volverse en contra de la empresa, generando un problema de reputación. Primero hacer, y luego decir.
Comunicar las iniciativas de sostenibilidad que lleva a cabo una empresa no tiene por qué ser negativo: las organizaciones responsables no deberían dejar de lado la comunicación, ya que contar lo que hacen es una parte fundamental de su actividad, no sólo para ganar reputación, sino también para que cunda el ejemplo, para ayudar a extender las prácticas de sostenibilidad e ir avanzando en la creación de un entorno mejor: más limpio, más justo y más próspero.